El arribo de la embarcación se produce apenas horas después de que el crucero lanzamisiles USS Lake Erie atravesara el canal y se incorporara a la operación naval, según avistamientos en la plataforma MarineTraffic.
PANAMA: El buque destructor USS Sampson atracó en el puerto de Amador, en la costa pacífica del canal de Panamá, como parte del refuerzo militar que Estados Unidos ejecuta en el mar Caribe, en cercanía de las costas venezolanas. Así reportó este domingo el medio NTN24.
El arribo de la embarcación se produce apenas horas después de que el crucero lanzamisiles USS Lake Erie atravesara el canal y se incorporara a la operación naval, según avistamientos en la plataforma MarineTraffic.
De acuerdo con las imágenes difundidas desde el istmo, el Sampson realizó labores de abastecimiento de combustible. Esto antes de continuar su trayecto hacia la región caribeña, donde ya se concentran diversas unidades navales estadounidenses.
El envío de estas embarcaciones se enmarca en la estrategia del gobierno de Donald Trump contra el narcotráfico transnacional. Washington ha señalado directamente al denominado Cartel de los Soles —que, asegura, es liderado por Nicolás Maduro y altos mandos de su entorno— como una organización terrorista vinculada al tráfico de drogas. Así como a grupos criminales internacionales como el Tren de Aragua y el Cartel de Sinaloa.

¿Cuántos buques estadounidenses hay en las costas venezolanas
Además del USS Lake Erie y el USS Sampson, el despliegue estadounidense incluye a los destructores USS Gravely y USS Jason Dunham. Los cuales partieron recientemente desde la base naval de Mayport, Florida.
También se ha reportado la presencia en aguas cercanas a Curazao del buque de combate litoral USS Minneapolis-St. Paul.
Los destructores Sampson, Gravely y Jason Dunham están equipados con sistemas avanzados de defensa antiaérea y antisubmarina. Además de contar con capacidad ofensiva para atacar objetivos en superficie. El Lake Erie, por su parte, se trata de un crucero de misiles guiados con amplia experiencia en operaciones de interdicción y defensa aérea.
El Pentágono prevé movilizar hasta 4.000 marineros e infantes de marina en este operativo. Al que se sumarían aviones de vigilancia P-8, buques de guerra adicionales y al menos un submarino de ataque.
El despliegue naval estadounidense coincide con anuncios de Caracas sobre el fortalecimiento de su presencia militar en la frontera con Colombia y en aguas territoriales, en respuesta a lo que el gobierno de Maduro califica como “amenazas externas”.
Mientras tanto, plataformas de rastreo marítimo como MarineTraffic han confirmado los recientes movimientos de la flota estadounidense en la zona, lo que refuerza la percepción de un aumento de la tensión militar en el Caribe.