RUSIA:El presidente de Rusia, Vladímir Putin, sostuvo conversaciones el miércoles en Moscú con Steve Witkoff, enviado especial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó el Kremlin, el encuentro tuvo lugar apenas días antes de que expire el plazo impuesto por la Casa Blanca para que Rusia alcance un acuerdo de paz con Ucrania o se exponga a sanciones económicas severas, que podrían extenderse a los países que continúan comprando petróleo ruso.
El Kremlin no reveló detalles sobre el contenido de la reunión. Sin embargo, más temprano ese mismo día, Witkoff fue visto caminando por el parque Zaryadye, a pocos metros del Kremlin, acompañado por Kirill Dmitriev, enviado del presidente ruso para la inversión y cooperación económica, según imágenes difundidas por la agencia estatal TASS.
Dmitriev ha sido una figura clave en las rondas de diálogo entre Rusia y Ucrania celebradas en Estambul en los últimos meses, así como en contactos directos con funcionarios estadounidenses. No obstante, hasta la fecha, las negociaciones no han producido avances sustanciales para detener una guerra que ya supera los tres años desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.
El plazo definido por Trump para llegar a un acuerdo de paz vence este viernes. En caso de que Rusia no detenga los ataques y las muertes, Washington ha advertido que impondrá “severos aranceles” y otras sanciones económicas, incluyendo medidas contra países que comercian con energía rusa.
Trump ha expresado repetidamente su frustración por los bombardeos del Kremlin sobre zonas civiles en Ucrania, los cuales considera una táctica para minar la moral pública y la resistencia ucraniana. La intensificación de los ataques ha coincidido con llamados de Trump a Putin para que cese la violencia y avance hacia una solución negociada.
Durante la noche del martes al miércoles, las fuerzas rusas atacaron un centro recreativo en la región de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, provocando la muerte de dos personas y dejando al menos 12 heridos, incluidos dos menores, de acuerdo con el gobernador regional Ivan Fedorov. Según los reportes, se emplearon potentes bombas planeadoras en al menos cuatro ofensivas dirigidas contra la zona.
“Este ataque no tiene ningún sentido militar. Solo crueldad para intimidar”, escribió el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, en su canal de Telegram.
Analistas occidentales y autoridades ucranianas coinciden en que Putin intenta ganar tiempo y evita comprometerse con negociaciones de paz mientras sus fuerzas intentan avanzar sobre nuevos territorios. Aunque la ofensiva rusa iniciada en primavera ha mostrado más dinamismo que la del año pasado, los avances son limitados y han representado un alto costo en recursos y vidas. Hasta ahora, no se ha logrado capturar ninguna ciudad de relevancia estratégica.
Pese a la presión militar, las defensas ucranianas aún se mantienen, aunque la situación en la línea del frente sigue siendo crítica. A la amenaza directa contra Moscú, Trump ha sumado una advertencia a los compradores de petróleo ruso: de no alcanzarse un acuerdo, podrían imponerse aranceles elevados a las importaciones desde países como China e India.
“Tenemos una reunión con Rusia mañana”, dijo Trump el martes. “Vamos a ver qué pasa. Tomaremos una decisión en ese momento”.