NUEVA YORK: El alcalde Eric Adams expresó su dolor y pidió oraciones por las víctimas. La investigación sigue abierta.
Nueva York ha comenzado a dar el último adiós a las víctimas del tiroteo que dejó cuatro muertos el pasado lunes en un edificio de oficinas en el centro de Manhattan con el funeral este miércoles de la más joven, Julia Hyman, que se encontraba en su puesto de trabajo cuando ocurrió la tragedia.
Hyman, de 27 años, fue la cuarta en morir, luego de que el tirador Shane Devon Tamura disparara al azar frente a la oficina de Ruby Management donde se desempeñaba.
Tamura, también de 27 años, que residía en Las Vegas (Nevada), hasta donde la Policía de Nueva York ha extendido su investigación, se disparó mortalmente en el pecho tras asesinar a cuatro personas en el 345 de Park Avenue, en Midtown Manhattan.
Antes de llegar hasta la oficina de Ruby Management disparó contra Wesley LePatner, ejecutiva de la empresa Blackstone; el guardia de seguridad Aland Etienne; y el policía de la ciudad, Didarul Islam, con dos hijos y esposa embarazada.
Despiden a las víctimas
«Una madre, un padre y una joven llena de promesas. Nuestra ciudad lamenta cada una de estas vidas inocentes arrebatadas a sus familias y comunidades demasiado pronto. Por favor, mantengan a cada uno de ellos en sus oraciones», escribió hoy el alcalde de Nueva York, Eric Adams, en su cuenta de X.
La Policía y los neoyorquinos también realizan este miércoles el velatorio de Islam, con tres años y medio en la policía, en una mezquita del condado de El Bronx, quien será sepultado este jueves.
«Cada uno de los oficiales del precinto 47 (donde trabajaba) consideraba a Islam como su hermano. Todos juraron proteger a los neoyorquinos a cualquier precio. El lunes por la noche él cumplió su promesa», indicó además hoy Adams en sus mensajes en las redes.
Mientras, las autoridades continúan trabajando en la investigación sobre los motivos que tuvo Tamura para asesinar a estas personas, aunque ya ha trascendido que su objetivo era la Liga Nacional de Fútbol, con sede en el mismo edificio, a la que culpaba por sus problemas de salud mental.
Una de las cosas que se investiga es por qué tenía licencia para cargar armas ocultas si presentaba problemas mentales.
Tamura, que se ha sabido además es hijo de un policía retirado de Los Ángeles (California), disparó tan pronto entró al edificio con un arma de asalto que cargó desde el auto que estacionó en un lugar cercano en Park Avenue.