ESTADOS UNIDOS: California emerge como el principal frente de resistencia del Partido Demócrata contra el intento del presidente Donald Trump de rediseñar los distritos electorales para asegurar el control republicano del Congreso en las elecciones de medio término de 2026.
Trump ya inició su estrategia en Texas, donde los republicanos buscan ganar al menos cinco escaños adicionales en la Cámara Baja. Para bloquear la votación sobre el nuevo trazado, más de 50 demócratas texanos abandonaron el estado, impidiendo el quórum.
Con 52 distritos, California es el estado con mayor número de representantes y un bastión demócrata. El gobernador Gavin Newsom se ha convertido en una figura clave al considerar convocar elecciones especiales en noviembre para que los votantes aprueben una nueva propuesta de rediseño distrital
Un plan para suspender a la comisión ciudadana
Desde 2010, la Comisión Ciudadana de Redistribución de Distritos de California (CCRC) gestiona la delimitación electoral con base en el censo. Newsom pretende suspender temporalmente esta comisión e impulsar un nuevo plan de rediseño directamente ante el electorado, una medida sin precedentes.
Apoyo nacional y críticas a Texas
Newsom criticó al gobernador de Texas, Greg Abbott, por amenazar con destituir a los legisladores que salieron del estado. A su vez, recibió el respaldo de los gobernadores de Illinois y Nueva York, JB Pritzker y Kathy Hochul, quienes se han sumado a este frente contra el plan republicano.
Contraataque republicano en el Congreso
El congresista Kevin Kiley (republicano por California) anunció que propondrá una ley para prohibir todo rediseño de distritos electorales fuera del calendario del censo, anulando cualquier mapa aprobado antes de 2030. Esto escalaría aún más la disputa política a nivel nacional