WASHINTON: El presidente de Estados Unidos Donald Trump celebrará este sábado su cumpleaños número 79 con un desfile militar sin precedentes en Washington DC, que contará con tanques, helicópteros y cerca de 7.000 tropas. El evento, con un costo estimado de 45 millones de dólares, coincide con el 250º aniversario del Ejército estadounidense.
“Queremos lucirnos un poco”, afirmó Trump el martes pasado durante una visita a la base militar de Fort Bragg, en Carolina del Norte. “Si hay protestas, desplegaremos una fuerza muy grande”, agregó.
Sus palabras se produjeron en el contexto de recientes tensiones internas, luego de que ordenara el envío de tropas federales a Los Ángeles para responder a las violentas manifestaciones contra sus políticas migratorias.
El desfile de este sábado incluirá la participación de más de 50 helicópteros, entre ellos Apache, Chinook y Black Hawk, además de 150 vehículos blindados como 28 tanques Abrams M1A1, 28 Bradley y 28 Stryker.
Las tropas marcharán frente a sitios emblemáticos como el Monumento a Lincoln, el Capitolio y la Casa Blanca.
Al cierre del desfile, el equipo de paracaidistas Golden Knights del Ejército entregará al presidente una bandera estadounidense.
La organización del evento ha requerido el traslado y posicionamiento de equipo militar durante toda la semana. “Creo que la recepción será muy cálida”, declaró a la prensa el coronel del Ejército Kamil Sztalkoper. “¿A quién no le gusta una gran fiesta de cumpleaños cuando se cumplen 250 años?”, agregó.
Sin embargo, el despliegue ha sido cuestionado por diversos sectores. Manifestaciones bajo el lema “No Kings” (Sin Reyes) han sido convocadas en varias ciudades, incluida una concentración frente al desfile en la capital. El movimiento hace referencia a los ideales de la Guerra de Independencia de Estados Unidos y rechaza lo que consideran un uso político de las Fuerzas Armadas por parte del presidente.